La necesidad de terapias hepáticas innovadoras.
La insuficiencia hepática como consecuencia de una enfermedad hepática crónica progresiva o aguda representa una situación potencialmente mortal que puede conducir a un coma hepático y finalmente a la muerte si no se trata adecuadamente. Las terapias convencionales disponibles, aunque a menudo son beneficiosas para el alivio de los síntomas clínicos, no son eficaces en el tratamiento causal de la enfermedad hepática aguda sobre crónica o aguda. Por tanto, hasta la fecha, la única terapia eficaz de la insuficiencia hepática terminal es el trasplante de hígado. La introducción del trasplante de hígado como opción terapéutica ha reducido significativamente la mortalidad de los pacientes con insuficiencia hepática aguda. Los avances logrados en las últimas décadas en técnicas quirúrgicas, cuidados intensivos, régimen inmunosupresor y métodos de conservación de órganos han hecho del trasplante de hígado una forma de terapia bien establecida y exitosa.
Sin embargo, la escasez existente de órganos de donantes disponibles no permite una expansión significativa de los programas de trasplante, y el número de pacientes en lista de espera para trasplante supera ampliamente el número de órganos de donantes disponibles para trasplante. Por tanto, existe una necesidad urgente de desarrollar terapias alternativas o complementarias al trasplante de hígado. Se pueden concebir dos enfoques terapéuticos principales: soporte hepático temporal para unir la función del órgano hasta el trasplante o hasta la regeneración del propio hígado o curación permanente del órgano mediante trasplante de células para reparar el tejido dañado.
Requisitos de los sistemas de soporte hepático.
Para proporcionar un soporte temporal exitoso del órgano defectuoso en la enfermedad hepática en etapa terminal, se deben tener en cuenta las complejas funciones metabólicas de las células hepáticas. Las funciones principales del hígado son (i) transformación de metabolitos endógenos (p. Ej., Amoníaco) o componentes tóxicos exógenos (p. Ej., Fármacos, productos químicos) en metabolitos no tóxicos, (ii) regulación de moléculas pequeñas, en particular aminoácidos, carbohidratos y grasas ácidos, y (iii) la síntesis de proteínas como la albúmina o factores de coagulación que son liberados por el hígado a la sangre. Las alteraciones en una de varias de estas funciones pueden provocar acumulación de toxinas, desequilibrios en compuestos plasmáticos, por ejemplo, aminoácidos libres y / o hipoproteinemia, con consecuencias perjudiciales para el paciente. Por lo tanto, un sistema de soporte hepático ideal cumpliría todas las tareas principales del hígado humano en términos de desintoxicación, regulación y síntesis hepática.
Además de la funcionalidad y eficacia de los sistemas de soporte hepático, deben tenerse en cuenta cuestiones de seguridad. En particular, los sistemas utilizados para apoyar la función hepática en el hígado enfermo deben ser estables durante el período de tratamiento y mostrar funciones reproducibles para garantizar una calidad estandarizada. Además, se exige la investigación de la biocompatibilidad de los materiales utilizados y la prevención de la infección de los pacientes para garantizar la seguridad clínica de los tratamientos.
Sistemas de soporte hepático artificial
Los sistemas de soporte hepático artificial están destinados a eliminar las toxinas de la sangre de los pacientes con insuficiencia hepática mediante técnicas de adsorción mecánicas y / o químicas. Para proporcionar una desintoxicación eficaz, la mayoría de estos sistemas se basan en la desintoxicación del plasma del paciente con adsorbentes, tipo diálisis, utilizando carbón activado suspendido en el dializado para la adsorción de toxinas, o albúmina proporcionada en el líquido de diálisis como eliminador fisiológico de compuestos lipofílicos. El sistema de recirculación de adsorbente molecular combina la diálisis de albúmina con una columna de intercambio aniónico y de carbón, que permite el reciclaje de las moléculas de albúmina después de pasar por la columna de adsorbente. Se demostró que el sistema proporciona una eliminación eficaz de las toxinas plasmáticas del plasma en estudios preclínicos y clínicos. Se persigue un enfoque diferente en el dispositivo de desintoxicación de separación y adsorción de plasma fraccionado (FPSA), también conocido como sistema Prometheus, que conduce directamente el plasma a través de columnas adsorbentes sólidas para facilitar la eliminación de toxinas.
Se han publicado los resultados de varios ensayos clínicos aleatorizados de sistemas de apoyo artificial. El efecto sobre la insuficiencia hepática aguda de la diálisis con albúmina se investigó en un ensayo que incluyó a 49 pacientes tratados convencionalmente y 39 con terapia de diálisis con albúmina. Aunque se observó una tendencia hacia tasas de supervivencia más altas, no fue posible sacar conclusiones definitivas sobre la eficacia o seguridad del sistema. Estos resultados sugieren que la desintoxicación físico-química del plasma por sí sola no es suficiente para abordar la función hepática de manera que aumente la probabilidad de supervivencia. La cuestión de si la calidad de vida de los pacientes con enfermedad hepática aguda o aguda sobre crónica puede mejorarse mediante sistemas de soporte hepático artificial sigue abierta.